El pasado 16/03/2019, se hizo una multitudinaria manifestación en Madrid con el lema “La autodeterminación no es delito”. Convocada por la ANC, Òmnium, partidos independentistas y otras entidades del estado español, reunió miles de personas en pleno juicio de los presos políticos catalanes.
Más de 500 autocares, quince trenes AVE llenos, aviones y muchísimos coches han servido para trasladar a miles y miles de personas a Madrid, procedentes de Cataluña, pero también de Euskadi, Galicia, Andalucía o el País Valenciano.
Muchos de los autocares fueron y volvieron el mismo día, es decir, más de siete horas de ida y siete de vuelta. Yo hice el viaje con la ANC de Sant Martí (Barcelona). Nuestros autobuses salieron de delante del Auditorio y la primera parada fue al km 341 de la N-II, en el área de servicio de Alfajín (Zaragoza). No sé si habían quedado o fue una coincidencia, el caso es que de golpe, se reunieron más de un centenar de autocares. Se formaron unas grandes colas para utilizar los lavabos y pedir un bocadillo o un café en el bar del hotel una tarea imposible.
Pero lo más impresionante fue llegar a Madrid, al Paseo de la Castellana y ver unas inmensas hileras de autocares que ocupaban buena parte de los arcenes.
Área de servicio de Alfajín
Desayunando en el aparcamineto de autocares El bar del hotel lleno de gente
El Paseo de la Castellana se llenó de autobuses Manifestantes saliendo del área de aparcamiento
Barretinas en la Castellana
Curioso ver pasar esteladas y camisetas independentistas por los alrededores de la plaza Colón, donde se encuentra la madre de todas las banderas españolas. Allí, aunque minoritarios, ya pudimos disfrutar de los primeros insultos y vivas en España. Me pareció que la gente que iba a la manifestación se esperaba más reacciones y rechazo. En general, los madrileños suficientes preocupaciones tienen cada día y reaccionan igual que los barceloneses cuando se convoca una manifestación unionista. La ciudadanía local evita las calles por donde se celebrará el acontecimiento, a la vez que el gremio de la restauración no hace ascos de la clientela de aquel día: El dinero no tienen patria.
Plaza Colón
Tomando un bocadillo de calamares Esteladas en la Puerta del Sol Paseo del Prado El Prado en obras
Fuerte nivel de protección policial del presidente Torra. A los Mossos que habitualmente lo acompañan se añadieron agentes de paisano de la Policía Nacional – española -. Muchas y muchos representantes del gobierno y partidos catalanes se desplazaron a Madrid.
El presidentr Torra y el conseller Damià Calvet esperando el inicio de la marcha
Rufián y Maragall disfrutando del momento ¿Joan Tardà nostálgico?
Manifestantes y cordón de seguridad de la ANC Reivindicando la libertad de los presos políticos Una urna del plan B
En cuanto a la manifestación, además de miles de catalanas y catalanes venidos en los autocares del ANC y Òmnium, trenes y aviones, había representantes de la Castilla comunera, vascas y vascos de Alsásua, miembros del Sindicato Andaluz de Trabajadores/as, por poner algunos ejemplos. Destacar a diferentes «comandos» Fairy que hicieron las delicias de los asistentes.
Venidos de Euskadi Sindicato Andaluz de Trabajadoras/res Banderas de Izquierda Castellana
Comando Fairy
La Cibeles rodeada de independentistas Mega bandera versión independentista Cabecera de la manifestación
Me gustó mucho el estilo y el contenido del discurso de en Marcel Mauri. Frases como «no dejarse manipular por los partidos y los medios que solo buscan la confrontación». «Nuestro compromiso con la justicia universal también es vuestro compromiso», dirigidas a las ciudadanas y ciudadanos del estado español, me parecieron muy adecuados y más en el contexto que se pronunciaron.
La periodista Patricia López Cabecera ante el escenario Elsa Artadi chateando
Marcel Mauri, Òmnium Cultural Borràs, Torra, Mas, Alonso-Cuevillas Actuación en el escenario del acto Ramon Cotarelo Cierre del acto con el Ayuntamiento de Madrid al fondo